Juan Manuel Martin de Oliva, es español, casado y padre de tres hijos. Como técnico especialista en Comercio Exterior, ha desarrollado una carrera de 41 años ininterrumpidos en la banca, primero en España y luego en República Dominicana. En los últimos 22 años se ha concentrado en apoyar al sector turismo desde diferentes posiciones en el Banco Popular Dominicano, donde trabaja desde el año 1998.

Desde su actual posición, donde lleva 13 años como Vicepresidente Corporativo del Área de Turismo, tiene el privilegio de conjugar sus dos pasiones, la banca y el turismo.

Estando en esta posición, el Banco Popular Dominicano ha sido reconocido institucionalmente por organizaciones del sector, dentro de las que se destacan, la Bolsa Turística del Caribe, ASONAHORES, el Clúster Turístico de Samaná, la Asociación de Hoteles de la Zona Este, la Caribbean Traveling Network y el Consorcio Dominicano de Competitividad Turística. Pero para Martín de Oliva el mayor reconocimiento es que el Banco Popular sea nombrado y considerado como “El Banco del Turismo”.

El especialista en banca, Juan Manuel Martín de Oliva, en entrevista exclusiva con Factor de Éxito, nos da detalles en cuanto a las estrategias aplicadas en la reactivación del sector turístico en una alianza público – privada para satisfacer y atender a los turistas en el país en medio de la pandemia del Covid-19.

El Banco Popular es el principal financiador de proyectos turísticos en la República Dominicana; al cierre de 2019 la cartera de crédito estaba destinada a financiar proyectos turísticos que ascendían aproximadamente US$1,000 millones

¿Cuál es el análisis del impacto económico de la pandemia en el sector, específicamente en la cartera de crédito existente, y el financiamiento de nuevos proyectos turísticos en la República Dominicana?

Efectivamente, el Banco Popular es el primer financiador de turismo de la Republica Dominicana y así ha sido históricamente. Según información del Banco Central, tenemos un 46.5% a agosto de 2020 respecto al total de cartera del sistema bancario nacional.

Afortunadamente, el sector turístico en nuestro país está compuesto por empresas y sobre todo empresarios de alta calidad moral y con fuerte respaldo, debido a lo diversificado de su negocio a nivel mundial, lo que les ha permitido entrar en esta situación con fuerte capacidad de respuesta, sobre todo, a las grandes empresas. Sin duda, están sufriendo el impacto mundial del sector, pero trabajamos con ellos desde el primer momento en sus estructuras de préstamos para evitar deterioro de sus carteras.

En cuanto a la pequeña y mediana empresa relacionada al turismo, el impacto ha sido fuerte. No obstante, también pudimos dar paliativos con tiempo a una situación que se venía venir. Por igual, hicimos lo propio con los empleados que tienen facilidades de préstamos nómina.

Al tratarse de una pandemia mundial, hay una gran diferencia respecto a una crisis local. En esta ocasión, los gobiernos del mundo están apoyando considerablemente para que los bancos podamos ayudar a nuestros clientes con diversas medidas puntuales, permitiendo aplazamientos y poniendo a disposición del público préstamos con tasas de interés reducidas y plazos más cómodos a través de nuestros fondos. Otra diferencia importante es que las ayudas que estamos dando son temporales, pues no cabe la menor duda de que el turismo se va a recuperar y pronto volveremos a ver cómo el país vuelve a arrancar con este sector como locomotora del progreso.

¿Qué oportunidades ofrece el Banco Popular para los negocios en el área de turismo y al reimpulso del sector turístico de la República Dominicana en ambiente post COVID-19?

Acompañamos a cada cliente en función de sus necesidades. A nivel general, estamos contemplando aplazamientos de capital o permitiendo solo el pago de intereses hasta que el negocio vuelva a dar señales de arranque; al mismo tiempo, hemos dado un período de gracia en los préstamos de pequeños negocios y particulares y, en los casos que lo ameriten, hemos ampliado las facilidades a los clientes para permitirles mantener su negocio en marcha con el flujo de caja necesario, que les permita llegar al momento de una total reapertura en las condiciones económicas adecuadas.

De todos modos, repito: para nosotros nuestros clientes son únicos y evaluamos en cada caso su situación particular, bajo la filosofía de que somos un banco de relaciones de largo plazo y sabemos que, de nuevo, en su momento las empresas del sector turístico deben estar listas para atender a nuestros turistas en las adecuadas condiciones.

A su juicio ¿Qué implicaciones tendría para el sector turismo el no contar con el apoyo financiero que le ha ofrecido la banca privada para impulsar el turismo interno? ¿Qué opinión le merece la iniciativa de promoción del turismo interno?, ¿Cree usted que es un factor relevante en la recuperación considerando que es solo una fracción menor en el total requerido para alimentar la infraestructura turística que existe?

El turismo es un sector generoso con el resto de la economía. Con esto me refiero a que pensemos más allá del hotel y veamos cómo la economía de nuestro país está totalmente interrelacionada, directa e indirectamente, con el sector turístico. Por esta razón, no se puede hablar de tomar medidas puntuales para un sector como el hotelero, sin contemplar toda la cadena de valor que lo rodea como transporte, excursiones, oferta complementaria, restaurantes, etc., y sobre todo los recursos humanos.

A la hora de programar un apoyo entiendo que se han contemplado ayudas para todos ellos, y en eso la banca ha participado muy activamente. Es impensable imaginar la recuperación económica del país sin el apoyo de la banca local.

En cuanto a su pregunta sobre el turismo interno le comento que, desde el primer momento de la pandemia y debido a las restricciones de los países emisores de turismo, el turismo interno se ha visto de forma indiscutible como el primer paso para la reapertura, con múltiples beneficios colaterales. Estamos demostrando al mundo que tenemos un mercado abierto, con infraestructura y hoteles totalmente preparados para recibir turistas, con los protocolos sanitarios necesarios y estrictamente velados por las autoridades para que la estadía de un turista sea confortable y segura.

El turismo interno está fomentando la creación de empleo y apoyando a las pequeñas y medianas empresas, que son suplidores del sector, para que reinicien sus actividades poco a poco y, sobre todo, con cada visita a un hotel nacional los dominicanos están generando una creación de empleo necesaria para que muchísimas familias afronten la crisis económica con mayor holgura.

Con la campaña del Gobierno dominicano a través del Ministerio de Turismo, en la cual ha participado el Banco Popular Dominicano junto a otras entidades financieras y la Asociación de Hoteles y Restaurantes (ASONAHORES), se les ha dado importancia a los intermediarios como turoperadores y agencias de viajes.

Entiendo que es una demostración de la necesaria cooperación públicoprivada, en la que se están dando los pasos firmes para decirle al mundo que aquí estamos, esperándolos con los brazos abiertos, seguros y preparados, para brindarle la misma calidad de servicio a la que estaban acostumbrados nuestros turistas.

Todo ello, apoyados en el mayor bien que tenemos en nuestro país,que es la gente dominicana: seres humanos alegres, serviciales, capaces de sobrevivir a cualquier circunstancia con una gran sonrisa y esperanzados en el futuro. Siempre repito que los dominicanos tienen el don de demostrar siempre su calidez y su sonrisa, a pesar de llevar la mascarilla puesta.

¿Cuáles son las perspectivas económicas que se vislumbran en el sector ya oficializado la reapertura turística?

Nos queda mucho por delante hasta alcanzar una plena normalidad y será necesaria la cooperación de todos. Lo importante es que el comienzo ya está en marcha: vamos a depender de la apertura, como dije antes, de los mercados emisores y vuelos que se programen en función de la demanda internacional, pero tenemos la base lista: hoteles, aeropuertos, infraestructuras, sensación de seguridad, un gobierno que entiende perfectamente al sector y el Banco Popular, fiel a nuestro rol de “Banco del Turismo”, preparados para acompañar en este último tramo y que lleguemos a buen puerto.

Trabajemos mancomunadamente para cuando lleguen los turistas. Por la necesidad del ser humano de viajar y desconectar de su cotidianidad, entiendo que podemos ver una recuperación exponencial y, sin duda, la empresa turística dominicana estará más que preparada para cuando se acerque ese momento.

Y pensando en el largo plazo ¿Cuáles son las próximas inversiones que se estarán apalancando en financiamiento por parte del Popular? ¿Qué proyectos, cuáles destinos?

El hotelero en un empresario forjado en muchas batallas, experimentado y conocedor de lo que suponen las crisis en el turismo. Los hombres y mujeres del negocio turístico han sabido vencer, han llegado aquí y realizado grandes inversiones para quedarse. Durante esta pandemia, más que asustarse, lo que han hecho es mejorar y remozar sus instalaciones, para ofrecer un mejor producto. No ha habido una sola inversión en curso de clientes del Banco Popular que se hayan parado o pospuesto. Todo lo contrario. Ellos conocen perfectamente su negocio y seguiremos apoyando las inversiones en el sector, porque tenemos fe en su determinación. Seguiremos acompañando a nuestros clientes y futuros inversionistas allá donde amerite.