La pasión, la voluntad y los sueños no tienen género
La industria automotriz no es solo un territorio de motores y tecnología, sino también un campo de batalla por la igualdad de género. Luisa Fernanda Valderrama, una líder incansable en el mantenimiento automotriz, comparte su viaje de cuatro décadas desafiando expectativas y liderando la revolución en un mundo predominantemente masculino.
Valderrama es presidente- co fundadora de la Organización Americana Mujeres Líderes en Mantenimiento Automotriz, cuenta con 45 años de experiencia y se ha destacado durante todo este tiempo en ser una voz influyente en el ámbito del mantenimiento automotriz.
Desde sus humildes comienzos como la única mujer en obtener el certificado de aptitud profesional en mecánica automotriz Diesel en América, hasta su actual posición, su carrera ha sido una historia de perseverancia y logros extraordinarios.
Cuando se le pregunta sobre su motivación para ingresar a un campo predominantemente masculino, Valderrama recuerda con claridad su infancia llena de curiosidad por los vehículos. Su enfoque apasionado y su firme determinación la llevaron a superar los desafíos de una época donde la equidad de género era una utopía.
A lo largo de su carrera, Valderrama ha sido un faro de esperanza para otras mujeres en roles técnicos y de liderazgo en la industria.
Desde WAM 21, tiene una visión clara para el futuro y que el objetivo es el semillero más grande de mujeres en América. Su compromiso con la dignidad, responsabilidad, conocimiento e integridad es evidente en cada palabra y acción.
Más allá de su destacada carrera profesional, Valderrama comparte un aspecto personal significativo, su papel como madre: "Ser madre soltera nunca fue un impedimento para mis sueños", Sus dos hijos, profesionales exitosos y seres humanos ejemplares, son el testimonio viviente de su fuerza y determinación.
La historia de esta increíble profesional es un recordatorio poderoso de que el género no define el éxito, y que con pasión, perseverancia y propósito, cualquier barrera puede ser superada. Su legado continuará inspirando a las generaciones futuras a alcanzar nuevas alturas en la industria automotriz.
Como pionera en el liderazgo de gestión integral de mantenimiento automotriz en América, ¿cuál fue su principal motivación para ingresar a un campo predominantemente masculino y cómo ha contribuido esta experiencia a su crecimiento personal y profesional?
La inspiración para hacer parte de la Industria del mantenimiento Automotriz vino desde muy niña tal vez desde los 7 u 8 años cuando me comencé a preguntar el por qué los vehículos, los automóviles, los camioncitos de aquella época se movían solos y esa curiosidad me llevó a los 14 años a ingresar al servicio nacional de aprendizaje SENA en Colombia a estudiar mecánica automotriz Diesel.
Nunca me detuve a pensar si la mecánica o el mantenimiento era para mujeres o para hombres . Yo considero y desde siglo pasado he pensado que la pasión no tiene género, que la voluntad no tiene género, que los sueños no tienen género entonces nunca pensé que debía estar ahí porque fuera masculinizado no, sino porque ese era mi sueño y porque era mi sentir .
¿Cómo desarrollé mi vida profesional? Es un universo que me brindó muchas experiencias y oportunidades. Me enseñó a posicionarme correctamente en la industria, a enfrentar retos, verdaderos desafíos. Comencé en el siglo pasado, una época sin redes sociales, sin equidad de género, sin derechos humanos, donde las acciones eran genuinas, hechas con responsabilidad y pasión. Esto permitió que desarrollara una carrera impactante. Me convertí en la primera mujer en el continente con registro académico en reparación de autos a gasolina y diesel en 1979. Después de muchas décadas, quizás entre 30 y 40 años, me di cuenta de esto. Afronté todos los desafíos y hoy me siento feliz de poder transmitir este impacto, este sentir, esta pasión a otras mujeres. La vida me premió siendo la pionera para las mujeres de WAM21 en el continente americano."
Como líder en la industria automotriz durante más de cuatro décadas, ¿cómo ha sido su experiencia al romper barreras de género y abrir camino para otras mujeres en roles técnicos y de liderazgo en este sector?
Ha sido difícil, pero no imposible. Considero que el empoderamiento, la experiencia, el conocimiento, las ganas, la responsabilidad, la integridad, la voluntad, y el deseo de superar desafíos, todo ello me ha permitido mantenerme en la industria. No fue fácil, pero un trabajo realizado con responsabilidad nos lleva a grandes objetivos. Eso es lo que quiero transmitir a otras mujeres: la dignidad, la responsabilidad con la que debemos posicionarnos en una industria que es para todos. No debemos verla como algo ajeno, ya que todos contamos con la capacidad de desarrollar ideas y enfrentar estos desafíos.
Su certificación en el programa TARGET GENDER EQUALITY de las Naciones Unidas destaca su compromiso con la igualdad de género.
Así es, en WAM21 tenemos el compromiso de fomentar la participación de la mujer en la industria del mantenimiento automotriz. Contemplamos que esta industria es totalmente transversal; nace con la invención de la rueda, hace aproximadamente 5000 años antes de Cristo. Desde entonces, el mantenimiento automotriz ha sido fundamental para el funcionamiento de todas las industrias, tanto urbanas como rurales: agricultura, minería, transporte fluvial, aeronáutica, aeroespacial, construcción, entre otras.
Es un compromiso grande, por lo cual hemos adquirido la certificación del Target Gender Quality de las Naciones Unidas. Esto implica fomentar la inclusión de la mujer en la industria del mantenimiento automotriz en todo el continente, asegurando la calidad en este proceso.
¿Qué iniciativas o cambios específicos ha implementado en su carrera para promover la equidad de género y la diversidad en el ámbito laboral?
Fomentar la dignidad es nuestra premisa en WAM21. Consideramos que ni las cuotas, ni las imposiciones, ni la victimización, ni la queja nos llevarán a posicionarnos en la industria. Es el aporte con responsabilidad, conocimiento y pasión lo que realmente transformará esta industria. Generar un ambiente de sororidad y, lógicamente, de integridad es fundamental. Desafortunadamente, la industria presenta altos indicadores de corrupción al integrar a la mujer; esto debe modificarse.
Esta es la gran diferencia con la que queremos incursionar y conquistar la IMA (Industria del Mantenimiento Automotriz), porque lo merece. Es la segunda industria con mayor impacto en el planeta, en la sociedad, en el medio ambiente, la seguridad en tierra, mar y aire, la economía circular, la economía de los países y la rentabilidad. Por lo tanto, como mujeres, merecemos generar esos verdaderos cambios en los impactos mencionados.
A lo largo de su trayectoria, ha ocupado cargos de liderazgo en diferentes áreas de mantenimiento automotriz. ¿Cómo ha integrado su enfoque humanista y su atención a las personas en la gestión de equipos y en la resolución de desafíos técnicos?
Cuando uno da valor a cada aporte y así lo transmite a sus respectivos equipos de trabajo, los resultados son los mejores, un colaborador en la industria es un protagonista de la historia y del desarrollo del planeta y la sociedad, y así es que se debe manifestar y tratar como protagonista.
Como fundadora y presidenta de la Organización Americana de Mujeres Líderes en Mantenimiento Automotriz (WAM 21), ¿cuál es su visión para el futuro de esta organización y cómo planea seguir apoyando el crecimiento y desarrollo profesional de las mujeres en el sector automotriz?
Desde WAM21 queremos generar el semillero más grande de América ( Colombia ???????? y México ????????) de mujeres WAM21 ( Women in th automotive maintenance industry in the 21st century) que transforme la industria y cubra las necesidades de perfiles en el continente americano.
Esto con dignidad, responsabilidad, conocimiento e integridad.
Además de su destacada carrera profesional, ¿puede compartir alguna experiencia personal que haya sido especialmente significativa para usted en su viaje hacia el éxito?
Sí, ser mamá de dos extraordinarios profesionales, altamente competentes, íntegros y muy humanos, ese es el aporte de Luisa Fernanda Valderrama a la sociedad y el planeta.
Soy madre soltera y nunca, nunca, nunca fue un impedimento para mis sueños, por el contrario, fueron y siguen siendo los motores más potentes de mi vida.