Cervelli también ha incursionado como comentarista deportivo, narrando y dando aportes de su conocimiento del juego de béisbol para la TV. Seguramente, en un futuro muy cercano será visto nuevamente en la pantalla chica.

Hoy en día se ha convertido en un modelo a seguir por cientos de jóvenes, en su mayoría deportistas, que les gustaría tener las cualidades integrales de este beisbolista tuvo durante años, como jugador en las Grandes Ligas, ocupando la posición de receptor.

En el 2020, una vez culminada la temporada anunció su retiro luego de 13 temporadas en Las Mayores.  El fin de una etapa, pero el comienzo de otras en su vida. Este año se estrenó como Coach de receptores del equipo de Los Padres de San Diego y fue pieza fundamental desde ese puesto para alimentar con sus conocimientos a los jóvenes receptores del equipo californiano. Los Padres de San Diego llegaron a la postemporada de MLB este 2022, luego de muchos años ausentes, y sorprendieron a los favoritos Dodgers de Los Ángeles en la primera etapa del playoff, quedándose muy cerca de llegar a la Serie Mundial.

Cervelli debutó en el 2008 con los Yankees de Nueva York, convirtiéndose en el jugador venezolano 234 en ascender a la categoría mayor del béisbol organizado. Ganó un anillo de Serie Mundial con el equipo del Bronx en el 2009.

Posteriormente, fue adquirido por el equipo de los Piratas de Pittsburgh en noviembre del 2014. Los Piratas cambiaron a Cervelli a los Bravos de Atlanta en el 2019. Y finalmente culmina su carrera como jugador activo en los Marlins en el 2020.

Destaca de igual manera su participación en el 2009 en el llamado Clásico Mundial de Béisbol. Allí fue convocado por la Seleccion Nacional de Italia, en calidad de receptor titular, debutando con los Azzuri. Vale destacar que este deportista cuenta con doble nacionalidad, venezolana e italiana.

¿Cómo fue su pasantía por el béisbol venezolano?

Jugué en la Liga de Beisbol Profesional de Venezuela hasta la temporada 2011/ 2012 con el equipo de Los Cardenales de Lara. Posteriormente, me integré al tradicional y popular equipo de Los a Navegantes del Magallanes.

¿Qué siente por Venezuela?

Siempre he estado dispuesto a ayudar a su gente. Nunca he dudado a unirme a alguna causa o evento realizado para aportar al bienestar de mis compatriotas. Le otorgo un gran valor a la justicia, razón por la cual siempre estaré atento a los escenarios sociales de mi país, el mundo, y especialmente de Latinoamérica.

Vivió muchos años en República Dominicana. ¿Cómo fue esa experiencia?

En el 2002 llegué a Dominicana, y al siguiente año tuve la oportunidad de jugar en la Liga de Verano de allí. Justamente en el 2003, logré firmar con los Yankees de New York, franquicia con la que estuve jugando durante 12 años.  Me encanta esta isla, su cultura, su comida, pero por sobre todo su gente; alegre, extrovertida, con identidad. Siento una gran empatía por Dominicana.

¿Cómo fue su debut como comentarista en la TV?

Una intereante responsabilidad, mi debut en esta faceta como comentarista deportivo me gustó, tanto narrando y dando interesantes comentarios en los partidos de béisbol. Me gusta mucho realizar este tipo de trabajo y me esfuerzo por aprender cada día más sobre este mundo. Seguramente, en un futuro muy cercano volveré a estar en pantalla.

Las lesiones son parte del juego de béisbol, pero con usted fueron muy frecuentes. ¿Cómo las sobrellevó?

Me acostumbré a aguantar y superar “los golpes” y obstáculos de la vida, en verdad muy pocos, son capaces de no retirarse, hasta el punto de arriesgar su vida. Después de haber sufrido siete contuciones en mi cabeza, los médicos me advirtieron, una vez más, que seguir jugando resultaba muy arriesgado y peligroso. Por eso, en el 2020 anuncié mi retiro una vez finalizada la temporada. Después de llevar toda una vida dedicada en cuerpo y alma al béisbol, comencé una nueva forma de vida, muy diferente a la acostumbrada desde muy joven. En estos momentos me encuentró en plena etapa de adaptación.

¿Cómo ha sido esa adaptación?

Estoy tratando de adaptarme poco a poco. Siento que recién estoy cumpliendo un año de edad en mi vida.  Me estoy estrenando en un “nuevo mundo”, porque el que tenía antes era muy diferente. Es algo difícil porque ahora siento que tengo tanto tiempo, que no tengo idea de cómo administrarlo. Pero me gusta esta nueva etapa. Quiero aprender mucho de negocios y rodearme de personas que me enseñen cómo llegar a ser un Business Man. Aprender de las maneras para poder ayudar a otros.

Siempre sentiré esa gran pasión que despierta el béisbol en mí, pero sinceramente, no extraño mucho los juegos en el terreno, ya que los últimos años fueron bastante difíciles para mí, por la cantidad de golpes que recibí en la cabeza. Lo que realmente extraño es a la fanaticada, ser beisbolista siempre estará en mi sangre. El béisbol logró despertar en mí, como nada en este mundo, mi pasión, mi espíritu guerrero, mi entrega, mi carácter servicial y mis ganas de lucha por un trabajo en equipo. Eso nunca lo olvidaré.

¿Y los próximos retos?

Mis próximos pasos, en donde seguiré dando mi aporte en capacidad, disciplina e integridad para seguir cumpliendo con nuevos objetivos y metas, están enfocados a esta faceta como coach de receptores de Los Padres de San Diego.