Como escudo para la discriminación, Sorangel Fersobe afirma que sale a brillar con luz propia, sin darle importancia al color de piel o el acento, lo que importa es el alma y la intención. 

La arquitecta dominicana Sorangel Fersobe, es una apasionada de la ciudad de New York. Estudió en República Dominicana y, luego de varios años trabajando en Santo Domingo en Dirección de Arte para comerciales de tv, decidió emigrar a la Gran Manzana, en el 2001, para hacer Dirección de Arte, pero en cine. “NY estaba en mi cabeza desde 1990, cuando vine un verano con la ODTE a un work and travel program. Cuando llegué en el 2001, trabajé en una oficina donde hacíamos gift with purchase y purchase with purchase items para grandes marcas. Ese trabajo me permitió buscar trabajo en dirección de arte y regresar a él cuando no tenía trabajo de cine, que siempre fue free-lance”, cuenta.

Sin embargo, hoy Sorangel se desempaña en Bienes raíces, un área bastante vinculada a sus estudios, pero como dice ella “de diferente ejecución”. Su amor por la Arquitectura y la ciudad de New York, le generó la pasión por las ventas de Bienes Raíces. 

“Mi novio en ese momento, que ahora es mi esposo, Hernán Toro, me veía en la computadora tarde en la noche viendo todos los listings en Manhattan y me motivó a hacer de esa curiosidad una carrera, y me encanta. Creo que en otra ciudad no se me hubiera despertado esa chispa por los Bienes Raíces, pero aquí es fascinante”. Actualmente, está dentro de la empresa Berkshire Hathaway HomeServices.

“Vengo de una familia de empresarios independientes; aunque también fueron empleados, mis padres generaron en mí la pasión por las ventas y la libre empresa. Crecí en una librería/juguetería, donde con 12 y 13 años iba a trabajar, vendiendo libros y juguetes. Me sigue apasionando la dirección de arte también y ahora me doy el lujo de ser un poquito más selectiva al elegir un proyecto, una película al año, o cada dos años para satisfacer mi vena creativa. Por lo demás, estoy enfocada en desarrollar mi equipo de Bienes Raíces y hacerlo crecer, en paralelo y conjuntamente con el negocio de mercadeo social que me dejaron mis padres, que es una belleza de negocio, sumamente noble para envejecer dentro de él”.

Sorangel tuvo la oportunidad de ir a Hult International Business School y hacer una maestría en negocios (MBA) en el 2014-2015. Ahora es voluntaria y dirige el Alumni Chapter en la ciudad de Nueva York, para mantener a la comunidad de Hult conectada.

Como presidente del Alumni Chapter de HULT Business School, ¿cómo ve el liderazgo femenino? ¿Cómo lo ejerce?

El liderazgo femenino parece tener un boom hoy en día, ya que finalmente tenemos una mujer Vice-Presidente en EEUU y en RD, aunque allá no es primera vez, cierto? Pero en tu círculo pequeño, cómo te desenvuelves, a lo largo de tu vida, tu familia, tu escuela, tu universidad, tus amigos, es lo que influencia tu liderazgo. Claro, si no lo tienes en tu crecimiento, lo puedes desarrollar por elección propia; pero, para mí, la mujer siempre fue líder por el ejemplo de mi mamá, quien era la Matriarca de la familia. Desde temprana edad desarrollé tendencias de liderazgo por el negocio de mercadeo social que desarrollaron mis padres cuando yo tenía 9 años. Recuerdo que fui presidente del colegio, muy cómico cuando salté de la cama a escribir ese discurso un día, que me vinieron las ideas de que escribirlo.

Hult, lo veo como una familia, y lo que hago es darle amor y juntar el alumnado varias veces al año, para no perder el vínculo unos con otros en el Alma Mater.  

¿Ha sentido discriminación por su género y su origen dominicano durante su trayectoria profesional en algunas de la áreas donde se ha desempeñado?

No, te diría que nunca. Siempre me he sentido sumamente internacional, y eso se lo debo a mi madre; quien fue Ingeniero Civil en República Dominicana, cuando las mujeres no estudiaban. Construyó carreteras y casas. Era una mujer morena bellísima, con una energía inagotable. Ella y mi papá se complementaban muy bien, ambos muy visionarios y de un pensar adelantados a su tiempo. Pero el otro día, entrevisté a un chico para que entrara a mi equipo, y me pareció algo descortés, medio echado en el sofá en zoom y tuve que llamarle para que entrara a la sesión, y estoy hablando de alguien de alto perfil en los negocios, y de ahí medio me dije “será porque lo estamos entrevistando dos mujeres?’’, yo y mi head broker; quien también tiene apellido latino, aunque ella no es latina, está casada con un latino. 

Y una vez sí fui discriminada en una filmación en República Dominicana, que trabajamos con un equipo alemán y me querían alojar en otro hotel en el pueblo de la Romana, mientras  todos ellos estaban en Casa de Campo. Pero mi productor no se los permitió. Pienso que he sido afortunada, realmente no he sentido discriminación. Sé que existe, pero también pienso que los discriminados se discriminan primero en sus mentes. 

¿Qué características debe tener una mujer para sobresalir? ¿Cuáles han sido las suyas?

Las mismas características de un hombre para sobresalir; ser excelente en lo que haces. Sobresalir por innovar o tener ideas creativas y nuevas al momento de brindar soluciones. Pienso que las mías han sido pensar positivo, y mantenerme en constante aprendizaje en lo que hago. Como una esponja aprendiendo de los que tienen mejores resultados que yo. Ser proactiva, y definitivamente, mi energía.

¿Cuál es la lección más importante que ha aprendido en la vida?

Uff, esta pregunta es bien difícil de contestar. Son tantas y se acumulan para hacer de ti quien eres hoy. Pero obligarme a actuar cuando las ideas surgen y no pensar mucho y ejecutar es más importante que perfeccionar. La perfección vendrá después de hacer las cosas varias veces. Actuar a pesar del miedo. 

¿Algún mantra, mensaje, libro o consejo que la ha ayudado a lo largo de su camino profesional?

Elegir ser feliz y despertarme con una actitud de gratitud. Agradeciendo por el sol de este día.

El mantra es decirme a mí misma frente al espejo claro que tú puedes. Y pienso si Dios puso ese pensamiento en mi mente, es que lo puedo lograr. De vez en cuando, cuando tengo una entrevista especial o quiero subir mi nivel a peak performance, brinco, bailando unos 3-5 mins, con una canción de Robbie Williams, “I love my life”, el coro dice “I’m powerful, I’m beautiful, I’m free”.  Libros son muchos, pero hay 3 clásicos empresariales, que pienso deberían adoptarlos a temprana edad en las escuelas, que te desarrollan visión, compasión y amor incondicional por los demás: “Piense y Hágase Rico,” de Napoleón Hill, (1937) “Como Ganar Amigos e influir sobre las personas,” de Dale Carnegie, (1936) y “La Magia de Pensar en Grande” de David J. Schwartz. (1959).  

Son unos verdaderos clásicos que no pasan de moda. De hecho, mis padres, son de esa generación de los 30, y le tengo un respeto y amor a esa generación, The silent generation, es que mira que adelantados eran, que estos libros son tan relevantes hoy como fueron en su momento. Y justamente estoy leyendo uno ahora, “Capitalismo Solidario, gente ayudando gente ayudarse así mismo” es impresionante la fórmula mágica en los negocios que escribe Rich DeVos ahí. El aha moment total. 

Otro de mis mantra es “ Be positive and Make the impossible possible (Im possible)”.