Sembrar esperanza e inspirar son los pilares que me mueven
Katherine Durán es una dominicana comprometida. “Cada vez estoy más convencida de que debemos continuar creando oportunidades para las mujeres y niñas, no solo del país, sino del mundo, para romper con el ciclo generacional de la pobreza que inicia con nosotras, las mujeres”.
Afirma que servir y acompañar el crecimiento de las personas a su alrededor es su mayor motivación. “Si he de transcender, me encantaría que fuera con un legado que transforme la sociedad y el país en un lugar mejor”.
Y en eso ha enfocado su trabajo como gerente de Educación de la Fundación Tropicalia y directora de Soy niña, soy importante, iniciativa que acompaña a las niñas que viven en condiciones vulnerables con el propósito de proteger su infancia, guiarlas para fomentar la toma de decisiones asertivas, y educarlas a ellas y a su comunidad acerca de sus derechos.
Katherine señala que desde el 2013, cuando Soy niña soy importante comenzó, han impactado la vida de más de mil niñas en el municipio Miches de la provincia de El Seibo. “Hemos visto cambios significativos de aceptación de su identidad, mayor claridad frente a un proyecto de vida y hemos elevado sus conocimientos sobre vida sexual y reproductiva y violencia basada en género”, comenta.
Trabajar en Miches le ha cambiado la vida. “No hay retribución de ninguna índole que me compense más que haber sido testigo del crecimiento de tantas niñas, y saber que desde la Fundación Tropicalia estamos cambiando sus vidas y, a través de ellas, las de sus familias, el país, y el mundo”.