Una trayectoria extraordinaria volcada al servicio social y el desarrollo económico
Fundó Alianza Dominicana, la institución de mayor relieve e impacto en la comunidad dominicana de NYC. Ahora maneja la iniciativa ¡Aha! Strategies, consultora dirigida a pequeñas empresas y organizaciones sin fines de lucro, afectadas por la crisis de la pandemia.
Entrevistamos a Moisés Pérez, destacado dominicano americano, quien ha tenido una trayectoria extraordinaria dedicada al servicio público desde los sectores de educación, salud, tecnología, miembro de numerosos comités y consultor de pequeñas empresas y organizaciones sin fines de lucro. Nuestro entrevistado ha impactado positivamente la calidad de vida y futuro de muchas personas de escasos recursos y diversos orígenes, especialmente a la comunidad dominicana en New York.
Ha sido merecedor de muchos reconocimientos tanto en los Estados Unidos como en República Dominicana, ha recibido la Medalla de Honor de Ellis Island, Premio Points of Light otorgado por el ex presidente de los Estados Unidos, George Bush. También la Medalla de exalumno distinguido-Brooklyn College, City University of New York, y la Medalla de Honor Presidencial por el ex presidente de la República Dominicana, Hipólito Mejía, entre otros.
La historia de Moisés como emigrante comenzó cuando se mudó a West Harlem con su familia en el año 1964. Apenas siendo estudiante de secundaria se vio influenciado por el "Movimiento de Escuela Libre" de la década de los 70, posteriormente cofundaría City As School, una escuela secundaria alternativa dentro de la Junta de Educación de la Ciudad de Nueva York. Se graduó de Brooklyn College, mención Cum Laude, posee una Maestría en Educación en Columbia University-Teacher’s College. Inicia así su activa carrera al servicio de la educación
Usted es una persona con extraordinarios aportes a la sociedad, especialmente a los jóvenes y familias desfavorecidas, en el ámbito educativo, tecnológico y salud ¿Cuándo comenzó a tener esa visión de qué era posible cambiar las condiciones de vida de las personas?
El tema de servicio fue siempre de gran importancia en nuestra familia. La idea de vivir sin
referencia a otros nunca fue una opción. Para nuestros padres el concepto de éxito era una vida dedicada al trabajo, con propósito, y, sobre todo, en servicio a otros. Diría que desde niño he vivido esa expectativa de mis padres que al morir uno haya dejado el mundo un poquitico mejor de lo que lo encontró.
En términos profesionales, durante mi último año de bachillerato se me presento una oportunidad única que transformo mi vida profundamente. Fui 1 de 2 estudiantes escogido después de un largo concurso en la ciudad de New York por el canciller de la Junta Central de Educación para participar en el diseño y lanzamiento de una nueva escuela experimental llamada City as School, entonces una de las innovaciones de más importancia al sistema de educación de New York en décadas. Me convertí en un lector voraz de todo lo que se escribía sobre el tema de reforma a la educación. Por primera vez con apenas 17 años vi como una simple idea se convertiría en una fuerza innovadora dentro del sistema de educación más grande y complejo en los Estados Unidos.
La experiencia despertó en mí un gran interés sobre el tema de la educación y decidí dedicarme a su estudio.
Nuestro entrevistado expresó “he vinculado mis gestiones sociales hacia la responsabilidad y el servicio social, así como el desarrollo económico. La diáspora dominicana hacia los Estados Unidos se agiliza después de la intervención militar americana del 1965. El éxodo durante las próximas dos décadas fue masivo. La ciudad de New York no estaba preparada para recibir estos emigrantes durante estos años tan difíciles. Ya para los mediados de los 80 la nueva comunidad de emigrantes sufría muchos problemas. Mi tarea en entonces fue establecer una presencia organizativa; una plataforma para el lanzamiento de un sinnúmero de proyectos e iniciativas para mejorar la condición social, promover el comercio y desarrollo económico. Lentamente fui reuniendo e integrando más y más jóvenes profesionales a la tarea hasta ver la creación de una poderosa institución”.
Recordó que “también fue necesario construir una fuerza política en el alto Manhattan. Logramos crear un distrito y elegir un dominicano al consejo municipal de la ciudad de New York y un representante en la asamblea estatal del estado de New York. Ahora hay políticos de descendencia dominicana en todos los condados de la ciudad. El barrio conocido como Washington Heights todavía constituye la mayor concentración de dominicanos fuera de la República Dominicana”.
Le preguntamos ¿Qué tan importante es la educación para alcanzar un mejor futuro? ¿Cómo podemos formar mejores líderes del mañana?
El gran interés que nuestros padres siempre demostraron por nuestra educación fue transformador. Cada hermano (6 hermanos varones) escogió la carrera de su interés: Ingeniero civil, Matemático, Ingeniero Eléctrico, Médico, Maestro, y Abogado. Este espíritu de superación personal y profesional lo demuestra nuestra madre que logro finalizar su estudio de Maestría a los 64 años.
Mi trabajo con la juventud se centraliza en el tema de la participación. Para formar mejores líderes es necesario darle participación en roles reales y vitales a la juventud. Es a través de la participación que las personas aprendemos e incorporamos las importantes lecciones de la vida; es a través de la participación que se canaliza toda la visión, creatividad, y entusiasmo de la juventud en proyectos de desarrollo nacional o comunitarios.
Esta no es una filosofía vacía. Por más de 30 años comprobamos su eficacia, ya que los jóvenes en Alianza Dominicana ocupaban más del 75% de todas las posiciones pagadas de importancia en una ONG con más de 300 empleados.
Éste es el verdadero espíritu renovador de una sociedad. Es literalmente verdad, que una sociedad que no planifica para la juventud, que no crea espacios para la juventud, no tiene futuro.
En los años ochenta usted fundó y fue director ejecutivo de Alianza Dominicana, Inc., la
cual comenzó brindando servicios voluntarios a la comunidad de Washington Heights y
luego fue ampliado su alcance a lo largo de los años. ¿Cuáles considera han sido los
proyectos más importantes y con mayor impacto de la Alianza?
El impacto de Alianza Dominicana, la institución de mayor relieve e impacto en la
comunidad dominicana de NYC, es generacional y sin precedentes. Cuando abrimos las puertas el vecindario de Washington Heights registraba algunos 130 homicidios anualmente. Cuando me retire 25 años después apenas se registrarán 5 homicidios en el vecindario. La creación de un sistema de servicios y apoyo para la juventud durante esas dos décadas y medio contribuyó decisivamente a este creciente estado de bienestar. La organización respondió en un momento clave en la historia de la diáspora.
Nos place hacer señalar tres importantes logros:
- Haber establecido de la nada, la organización más importante de la comunidad: Alianza
Dominicana con más de 350 empleados, se convierte en la principal fuente de empleo en la comunidad del alto Manhattan (sin contar las instituciones como escuelas y hospitales). Además, durante el verano Alianza empleaba más de 2,000 jóvenes a través del programa de empleo de verano y los colocaba en centenares de proyectos para beneficio a la comunidad. Una verdadera fuerza renovadora para una comunidad de emigrantes ahogándose en problemas.
- Triangle Project: El Triangle Building Project, para promover el desarrollo económico del sector, a un costo de $30M(US). La nueva construcción brinda espacio a la Universidad de Columbia, una cooperativa de crédito (banco), la junta comunitaria local, un centro cultural y sirve como sede de Alianza Dominicana. El nuevo edificio es literalmente el corazón de la comunidad. El Centro Cultural es el único de su índole en los Estados Unidos.
- Beacon Community School: Por varios años Alianza introdujo una gran cantidad de programas innovadores. Quizás el más impactante fue el proyecto bautizado “La Plaza.” La Plaza es una escuela comunitaria. El concepto básico es que en una comunidad pobre el activo más importante puede ser una escuela secundaria, con aulas, libros, espacio deportivo, computadoras, equipos, y más. ¿Por qué entonces limitar el uso de este importante activo a las horas de clases exclusivamente? Bajo ese concepto, abrimos un espacio de servicios en una escuela secundaria del barrio desde las 3:00pm hasta las 10:00pm, todas las noches. En total, más de 800 personas participan diariamente en actividades deportivas, artísticas, académicas, sociales, y culturales. Los padres también se benefician; toman clases de inglés, educación básica, y reciben ayuda con problemas de viviendas, inmigración y mucho más. A lo larga, La Plaza se convirtió en un punto central en el desarrollo del vecindario.
Es miembro del equipo fundadores y vicepresidente de SOMOS Community Care, donde se aseguran de que los médicos del vecindario atiendan a los beneficiarios de Medicaid en Nueva York con culturas e idiomas iguales ¿Esta iniciativa ha tendido un impacto positivo en la calidad del servicio de salud prestado a las personas inmigrantes en New York?
SOMOS Community Care ha tenido un gran impacto sobre el sistema de salud de la Ciudad de New York. Nunca se habían organizado de tal forma los médicos de atención primaria. En su gran mayoría, los médicos de SOMOS son de origen emigrante. Estos médicos le proveen atención primaria a más de un millón de pacientes que también suelen ser emigrantes y representan cerca de una tercera parte de todos los pacientes en el sistema de cobertura médica para los pobres en la ciudad de New York.
Una de las áreas bajo mi supervisión fue la creación y despliegue de un ejército de más de 100
Promotores de Salud. El entrenamiento y uso masivo de Promotores de Salud también representó una importante innovación al sistema. En base a su trabajo los promotores de SOMOS han logrado establecer un nuevo diálogo entre paciente y médico, algo nuevo en la práctica de medicina. La capacidad de hablar el idioma y cultura del paciente en una multiplicidad de puntos a lo largo de la ciudad de New York, es un elemento también nuevo y transformador. SOMOS presenta una respuesta a un sistema en búsqueda de reformas, especialmente para el tratamiento y cuido de una nueva demográfica social y cultural en los Estados Unidos.
Como miembro del comité fundador de SOMOS me siento extremadamente orgulloso de todo que ha logrado la institución en representación de los intereses de sus pacientes y sus "Médicos Comunitarios”.
Su última iniciativa se llama ¡Aha! Strategies, como nos explicó “el 2021 fue un año devastador para pequeños comerciantes y corporaciones sin ánimo de lucro en los Estados Unidos. El impacto social es significante. Según el presidente Joe Biden, al menos 100.000 pequeñas empresas que cerraron durante la pandemia de COVID-19 no volverán a abrir. El impacto agravado de la pérdida de empleo y el cierre de pequeñas empresas ha erosionado significativamente la base impositiva y los consiguientes esfuerzos de desarrollo comunitario. Se desenlaza una crisis sin precedentes para comunidades emigrantes como la dominicana. Restaurar este sector es uno de los principales objetivos de la nación”.
Nos cuenta que, en respuesta, fundó ¡Aha! Strategies, un bufete de consultores enfocado en apoyar pequeñas empresas y corporaciones sin fines de lucro aplicando técnicas de la planificación estratégica, la elaboración y manejo de proyectos, entrenamientos, y estrategias para la recaudación de fondos para el desarrollo institucional.
Recientemente ¡Aha! Strategies finalizó un proyecto de importancia para la Fundación Annie E. Casey (la fundación de niños más grande del mundo). Se organizó una conferencia nacional de jóvenes latinos (100 participantes) en los Estados Unidos. El informe final documenta la creación de un espacio que permite que los jóvenes, en sus propias palabras, compartan sus aspiraciones e inquietudes sobre el futuro.